Tantos episodios abarcó y tan larga fue la escena, que el maratón de bondage de A que no me dejas abarcó 10 publicaciones en las que vimos a Camila Sodi y Mónica Alexandre atadas y amordazadas sin cesar.
Pero todo debe terminar, y con la acción de los episodios 122 y 123 todo llega a su final.
Aquí vemos a Mónica escapar de sus ataduras, intentar alcanzar el teléfono y ser atrapada de nuevo. Entonces vuelve a ser atada en la cama donde estuvo la escena anterior, donde en la noche le quitan la mordaza para darle de cenar.
El final parece algo abrupto, pero ahí dónde lo ven todo acaba, resulta que el jugo tenía una droga para ponerla a dormir, y la siguiente vez que la vemos está desatada y libre, abandonada entre unas cajas de cartón en un parque.
Gracias a los productores, guionistas y directores de A que no me dejas por concebir esta escena genial y filmarla tan bien, y sobretodo gracias a las actrices por su actuación como damiselas en apuros.
Si ponen esto más seguido seguro suben los rankings de las telenovelas.
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